En este sentido el propio exministro de Comercio Exterior,
Francisco Rivadeneira, responsable de la negociación,
había aceptado que el acuerdo generará costos negativos: “
no existe lamentablemente un acuerdo donde todo el mundo salga ganando en cada país, lo importante es el costo de oportunidad entre nosotros y la UE, y ambos hemos salido ganando (…) En Ecuador, el costo de oportunidad es favorable. Ganamos más negociando el acuerdo que no negociándolo”, indicó, al tiempo que agregó que eso “
no significa que no haya perdedores“.